28 de noviembre de 2011

Relato. Sara


Diario de Isabel, proceso entre los 16 y los 17 años.

17 de Febrero de 2011
Mis amigas y yo tenemos 16 años, hace tiempo que hemos empezado a salir juntas por las noches y a estar con chicos. Todas ellas se han liado con alguno o tienen novio, pero yo no. No es porque no haya tenido oportunidades, sino que simplemente no me apetecía, el chico no me gusta, y no me apetece que mi primer beso sea con cualquiera.

5 de Julio de 2011
Por fin ha terminado el curso. En Julio como todos los años, mi hermana y yo venimos con mi padre a Chulilla (Valencia), el pueblo dónde nació mi padre. Hasta septiembre. Allí conozco a todo el mundo, menos a la chica nueva. Vive en la casa más vieja del pueblo con sus abuelos, la gente dice que sus padres se han querido librar de ella porque es muy problemática, pero  pasan los días y yo no veía que estuviera causando problemas. Aún así la gente sigue mirándola mal y nunca hablan con ella, además sus abuelos tampoco son muy amigables.

8 de Julio de 2011
Esta mañana me he quedado mirando cómo andaba, sus ojos miraban al suelo, arrastraba los pies moviendo las piedras sueltas del camino, parecía triste pero no puedo asegurarlo. La he visto salir del pueblo, no sé porque… pero he empezado a seguirla. Ha llegado a la orilla de un pequeño río, se ha tumbado en la hierba y ha encendido un cigarrillo. Yo no sabía qué hacer, ni siquiera podía llamarla por su nombre porque no me lo sé. Me ha recorrido un escalofrío de repente, algo me empujaba a hablar con ella, me hizo dar un paso y luego otro, no sabía que decir pero seguía andando hacia ella. Tenía los ojos cerrados, pero notaba que alguien tapaba el sol, aún así no los abrió, como si todo le diera igual siguió fumando. Otra vez sin yo quererlo me senté a su lado y le pedí una calada, aunque no fumaba, ¿por qué lo hice?, porque quería llamar su atención, quería que me mirara, quería conocerla.
No tenía razón, no estaba triste, estaba asustada. A pesar de que sus ojos verdes brillaban tanto, podía verlo, tenía miedo. Se ha sentado y me ha acercado el cigarrillo, lo he cogido pero no he fumado. Me estaba mirando directamente a los ojos, he vuelto a sentir ese escalofrío en mi espalda, tenía la sensación de que intentaba decirme algo pero soy incapaz de entenderlo.
No sé cuánto tiempo ha pasado pero hemos seguido mirándonos mientras el tabaco se consumía y el ruido de los rápidos del río hacía imposible escuchar cualquier otro sonido. Hasta que todo se apagó. Había cerrado los ojos, he tardado en darme cuenta pero me estaba besando. Estaba parada mientras ella me hacía sentir algo increíble, me sentía rara como si estuviera haciendo algo mal, pero no paraba… y yo no quería que parase, me estaba dejando llevar porque… ¿me gustaba? He abierto los ojos y la he apartado, no podía gustarme no es natural. Es presión, lo que siento es presión porque mis amigas ya han estado con alguien  y porque ya tengo 17 años.
Para cuando me he dado cuenta estaba corriendo, pero no sabía hacia dónde, ya no oía el ruido, asique estaba lejos de ella. Seguía con el cigarrillo en la mano, estaba medio consumido, ni siquiera he pasado cinco minutos con ella… pero me ha parecido mucho más tiempo.

20 de Julio de 2011
Me he pasado las últimas dos semanas evitándola, ni siquiera la he mirado a la cara, ahora soy como el resto del pueblo. Pero hoy ha pasado algo raro, me ha mirado ella a mí, ella que siempre va con la cabeza agachada se ha plantado en la puerta de mi casa, ha llamado al timbre y me ha dicho que quería hablar conmigo, yo quería cerrar la puerta y volver a meterme en casa pero me volvió a pasar, mis piernas salieron solas de casa, y a pesar de mis intentos de dar la vuelta siguieron a la chica sin nombre a las afueras del pueblo, al mismo sitio dónde nos habíamos besado.
Y otra vez tenía la misma sensación, me miraba y me quería decir algo pero ninguna palabra salía de su boca, era como si tuviera que confesar algo… como si realmente hubiese hecho algo malo. No sabía cómo hacer para que hablara, así que hice lo único que me había hecho sentir hasta el momento. Me acerqué poco a poco, esta vez lo hacía yo misma, notaba que sus ojos ya no buscaban una frase para decir, sólo esperaban… sólo me esperaban. Ya estaba junto a ella, notaba como su respiración y la mía se coordinaban, solamente me acerqué un poco más y la besé.

28 de Agosto de 2011
Dentro de 4 días vuelvo a Barcelona, he hablado con Sara (ahora ya sé cómo se llama) y hemos decidido que vamos a seguir juntas, aunque estemos lejos la una de la otra. Me gusta mucho, qué más da todo lo demás, se supone que tengo que ser feliz y que lo importante en mi vida soy yo, ¿no?
Por fin, tengo lo que quería, alguien que me gusta de verdad y un primer beso que mereció la pena.

- ¿Qué opináis de esta historia?
- ¿Creéis que es importante el amor en una relación? ¿Es secundario?
- ¿Cómo os sentiríais si os atrajera alguien de vuestro mismo sexo?

1 comentario:

  1. OlaAaA!
    CreEeo quee Las dOos ChicaAsS se Han EnamoOradOoo y esOo es MuuY bOnitoO!!! El AmoOr Es Loo masS ImpOortanteE en Uuna reLAciOn, a pArte De la CoonfianZaaaaa y el CariñOoo...
    Noo See Quee hariAaa si Mee gustasEee alguieEn de Mi sExo, pEro soy Muy TiMiDa para Dar Un PasSoO Taan ImpooRtante cOmOO ese... SseguRo que Me Mirariaaan Maal :S

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